MNCT 953 – No, de verdad… (Parte 1)
“No dejaremos de explorar, y el final de nuestra exploración será regresar al lugar donde comenzamos y conocerlo por primera vez”.
T.S. Elliot
En el último par de meses más o menos, he estado teniendo una serie de revelaciones sobre la naturaleza de la Mente, la Conciencia y el Pensamiento que han resultado tan alucinantes que pensé que podría ser el momento de escribir una secuela de The Inside-Out Revolución. El problema es que cuando los miro más de cerca, me doy cuenta de que son todos los mismos puntos que he visto e incluso he compartido antes. Lo diferente esta vez es que los veo con más claridad y a un nivel más profundo. Así que si fuera a escribir una secuela en este momento, el único título que podría legítimamente usar sería “No, de verdad …”
Durante las próximas dos semanas, me gustaría compartir algunas de estas ideas e historias con la esperanza de que pudieran catalizar algunas reflexiones y puntos de vista similares en ti…
1. Convirtiendo montañas en toperas
Cuando mi esposa leyó por primera vez The Inside-Out Revolution dijo que lo había disfrutado mucho, pero que le parecía ser una idea notablemente simple. Cuando le pregunté cuál era la idea dijo: “No conviertas toperas en montañas..”
A pesar de que pensé que realmente había comprendido el concepto (después de todo, yo escribí el libro), en octubre me encontré a mi mismo enterrado bajo una montaña de trabajo, enfermo y mentalmente cansado. Era consciente de que no estaba en condiciones de “subir la montaña”, así que me resigné a hacer lo mínimo necesario para mantener las cosas avanzando hasta que mi estado de ánimo y mi cuerpo volvieran a su estado natural de salud y equilibrio. Mi cuerpo se recuperó después de un par de semanas, pero todavía sentía que no estaba listo para volver a tomar el toro por los cuernos, así que dejé a la montaña a su suerte y seguí adelante con mi estrategia de “hacer lo mínimo” durante otra semana.
Y entonces sucedió algo interesante. El jueves de esa semana mi estado de ánimo se quebró, mi energía y entusiasmo por la vida regresaron, y estaba dispuesto a comerme el mundo, empezando por esa montaña de trabajo que había estado posponiendo durante más de tres semanas. Nada más había un problema inesperado en ese plan: cuando miré mi vida desde un lugar tranquilo y saludable dentro de mí, no pude encontrar la montaña.
Ciertamente había cosas por hacer – un par de llamadas que devolver y algunos mensajes de correo electrónico que responder – pero todos los pendientes se despejaron a lo largo del fin de semana y era como si yo nunca me hubiera ido.
Lo que me quedó fue un genuino sentido de asombro ante la dramática diferencia entre cómo se veían las cosas desde mi estado de ánimo bajo y el aspecto que tenían cuando mi resiliencia innata me regresó a la superficie. Incluso después de haber vislumbrado la naturaleza de dentro hacia fuera, de pensamiento creado, de la realidad una y otra vez en los últimos siete años, el contraste entre cómo se veía el mundo en la noche del miércoles y cómo se veía el jueves por la mañana me impactó.
Me acordé de una frase que escuché por primera vez de mi colega y amigo el Dr. Aaron Turner:
“Cuando sólo dos cilindros de tu coche funcionan, todo camino se siente como una colina.”
2. Como una rata en un laberinto
Uno de los productos más invisibles del principio de Pensamiento es el campo de lo que “damos por hecho” que intentamos navegar en nuestras vidas. Por ejemplo, una de las preguntas más comunes que la gente me pregunta es alguna variación sobre “¿Cómo puedo hacer más dinero este año?”
Si esa fuera toda la profundidad de la pregunta, la fuerza creativa dentro de cada uno de nosotros al instante se pondría a trabajar proporcionando tantas respuestas que nuestro único problema sería elegir nuestras favoritos del menú. Pero todo lo que “damos por hecho” y está tácito detrás de la pregunta hace las cosas un poco más complicadas que eso:
“Dado que …
No soy muy bueno con la gente
La economía está terrible
No tengo ninguna evidencia de que lo puedo hacer y mucha evidencia de lo que no puedo
No me gustaría que nadie piense que estoy siendo agresivo
El dinero podría ser malo
Estoy siendo egoísta al siquiera considerar sacar dinero de los bolsillos de la gente
Si yo fuera más espiritual, ni siquiera me preocuparía por esto
… ¿cómo puedo hacer más dinero en el nuevo año? ”
¿Notas la diferencia?
Antes de poder llegar a la pregunta real ya hemos puesto tantas limitaciones y restricciones a nuestras posibles respuestas que tendríamos suerte si llegáramos a tener una o dos ideas, ya no digamos una o dos ideas que nos gusten lo suficiente como para darles seguimiento.
Entonces, ¿qué podemos hacer acerca de este laberinto oculto de los pensamientos autodestructivos?
Imagina que eres una rata en un laberinto. Sabes, tanto por rumores como por experiencia, que hay un trozo de queso esperando en alguna parte, y que la única manera de conseguirlo es pasar el laberinto con éxito y, en algunos casos, más rápido que cualquiera de las otras ratas. Así que pones todos sus recursos tanto en aprender estrategias de paso de laberintos como en el desarrollo de tu energía y velocidad para la próxima carrera.
Con el tiempo, comenzarás a tener más y más éxito, y aunque te estás cansando y tu creciente abastecimiento de queso cheddar está teniendo un impacto negativo en tus relaciones, también te alienta a renovar tu compromiso de aprender aún más estrategias y de entrenar aún más duro para el limitado número de carreras en las que podrás participar el año que entra.
Hasta que… un día te despiertas y te das cuenta de que sólo estás imaginando que eres una rata en un laberinto. A partir de ese momento, eres otra vez libre para aprovechar el infinito potencial creativo de la mente más profunda y para utilizar tu sabiduría en la búsqueda simple y no contaminada de un objetivo simple y no contaminado.
En otras palabras, la manera de salir de la carrera de ratas no es ni mejorar en las carreras ni trabajar en la autoestima o la confianza de la rata. Es permitir que tu mente se aclare, que el sistema se reinicie, y que la parte más creativa, creadora de ti mismo vuelva a la mesa de dibujo. Después de todo, cualquier cosa es posible y todo está en el aire – justo hasta el momento en que usted decide que no lo es.
La próxima semana, voy a compartir un par más “revelaciones catalizadoras”, incluyendo por qué habría sido un gran espía y cómo el poder invisible del pensamiento es más potente y penetrante de lo que tú (o yo) pensamos. Hasta entonces, por favor, publica tus comentarios y puntos de vista en el grupo de FB de Inside-Out, ¡me dará gusto ver lo que han visto y escuchar lo que han podido escuchar!
Con todo mi amor,
Michael.